El Origen y las Variaciones del Postre Martín Fierro

Antes de que los brownies y las mousses dominaran la gastronomía dulce, existía una serie de postres tradicionales que todo restaurante incluía en su menú: budín de pan, flan y el clásico queso y dulce. En esta ocasión, nos enfocaremos en este último, conocido como el postre Martín Fierro, una combinación sencilla pero deliciosa de queso y dulce que ha sido tema de controversia entre argentinos y uruguayos por su origen y su preparación.

El Nombre y el Origen del Martín Fierro

El nombre Martín Fierro es un homenaje a la obra del escritor argentino José Hernández. Publicado en 1872, este poema narrativo relata las aventuras del gaucho Martín Fierro, y es considerado un símbolo de la reivindicación de los gauchos en la historia de la región del Río de la Plata. Sin embargo, este postre, a pesar de su nombre, es más conocido en Argentina bajo el pseudónimo de “Vigilante”, ya que se solía ofrecer a los centinelas de la cuadra como un tentempié rápido.

Preparación Sencilla, Pero Sabrosa

La preparación del postre Martín Fierro es sumamente sencilla, lo que lo convierte en una opción rápida y deliciosa para cualquier ocasión. El postre no requiere de cocción, solo se necesita elegir dos ingredientes principales: queso y dulce. Aunque la receta es básica, es importante que ambos ingredientes, el queso y el dulce, tengan el mismo grosor y tamaño para que se disfruten de manera equilibrada.

En Argentina, la versión más común del Martín Fierro se prepara con queso Mar del Plata, un queso suave y cremoso que complementa perfectamente al dulce. Sin embargo, existen variantes que incorporan quesos como el gruyer o el queso de leche de cabra, lo que le da un toque diferente a la receta. Además, algunos prefieren sustituir el dulce de membrillo por dulce de batata, dando lugar a la versión conocida como “Fresco y Batata”, que combina el queso con el dulce de batata y un queso blando rico en suero.

La Controversia Sobre su Origen

Al igual que otras cuestiones populares que son motivo de disputa en la región del Río de la Plata, como el origen del mate o el dulce de leche, el postre Martín Fierro también se ha convertido en una fuente de controversia entre argentinos y uruguayos. Ambos países reclaman ser los creadores de este delicioso manjar, pero la realidad, tal vez triste para algunos, es que su nacimiento no tiene su origen en Argentina ni en Uruguay, sino en la colectividad vasca.

Se cuenta que el postre tiene raíces en la tradición de las sidrerías vascas, en la región de Navarra, España. Allí, los comensales se reunían en las sidrerías para disfrutar de una comida sencilla, donde predominaban las preparaciones a base de bacalao. De postre, se servía una combinación similar al Martín Fierro, que consistía en trozos de membrillo, queso Idiazabal (un queso vasco elaborado con leche de oveja) y nueces, una combinación que recuerda mucho a la versión moderna del postre.

A pesar de las disputas sobre su origen, lo cierto es que el postre Martín Fierro sigue siendo un delicioso clásico en la gastronomía del Río de la Plata. Su simpleza y la combinación perfecta de sabores dulces y salados lo convierten en una opción que nunca falta en los menús de los restaurantes de la región. Ya sea con queso Mar del Plata, gruyer o de cabra, y acompañado del dulce de membrillo o de batata, el Martín Fierro es un postre que une culturas y sigue conquistando paladares con su sabor único.